''El gusto de estar''
El Negro Vagñasco se sumó hace poco al staff de trabajo del Nene Díaz en el predio de Villa Albertina y disfruta la oportunidad. "Hay nivel, hay muy buenos valores", dice de la Sexta División, su categoría.

¿Qué significa volver a Los Andes en esta doble función de entrenador y formador de juveniles?
Más que nada, el trabajo con los chicos es una de las cosas que más me gusta. Gracias a la experiencia que adquirimos como futbolistas, el gran desafío es enseñarles y de ahí en más, verlos progresar y que tengan la posibilidad de jugar en Primera.
Te reencontraste con muchos ex compañeros en Villa Albertina, ¿cómo lo viviste?
Para mí es una alegría porque ya lo veníamos haciendo hace un tiempo. El contacto más seguido es con el Pato Aimetta, con quien nunca nos dejamos de vernos, y después encontrarnos con el Nene Díaz, la Viejita Pizarro, lo mismo. Lo importante es que sabemos lo que queremos y nos damos el gusto de estar.
¿Qué análisis haces de la Sexta División?
Después de un tiempo, recién ahora nos estamos conociendo mejor, pero sin dudas, hay nivel, hay muy buenos valores. Lo único que debemos hacer es trabajar más el tema de la asistencia y concientizarlos que hoy tienen una oportunidad única de ser jugadores de fútbol. Entonces les pedimos constantemente que no falten, que entrenen como profesionales. Si logramos eso y le sumamos la calidad que tienen, se puede armar algo muy lindo.
Se vive una época completamente diferente a cuando vos jugabas en Inferiores…
Seguro. Los tiempos no son los mismos, pero uno tiene que tratar de llegarles a los chicos. Hay que llegarles de alguna manera. Dirigir en un equipo donde uno jugó tiene un plus, pero verlos progresar es doblemente feliz. Yo tuve la suerte de trabajar en San Telmo y compartir muchas cosas con jugadores que terminaron triunfando. Jonathan Santana, Federico Poggi, Mariano Izco que está en Italia… Y ellos pudieron.
Deseas lo mismo en Villa Albertina…
Es que es así. Está perfecto que Los Andes quiera estar en Primera, porque a mí también me pasó. Pero debemos pensar en el futuro de los chicos y del club. Ahí es donde debemos apostar. En la proyección.