Quiero los tres
Los Andes enfrenta este sábado desde las 11 a Almagro, en Lomas. Vivimos la previa junto al arquero Maxi Gagliardo. "Ojalá salga un partido abierto, con varias situaciones y lo podamos aprovechar", anhela. A buscar el triunfo.

¿Cómo llegan a este partido con Almagro?
Muy bien. Creemos que el envión anímico del otro día fue muy importante. Haber remontado ese partido en tan poco tiempo nos dio muchas fuerzas y espero que lo podamos aprovechar y plasmar esa intensidad de juego que tuvimos en los 14 minutos del segundo tiempo.
¿Son esos puntos que suman?
Sí, la verdad que hay que tomarlo así. Hasta uno mismo cuando nos hicieron el gol creí que era muy difícil que lo podamos empatar. Más que nada hemos demostrado que el equipo tenía ese fuego sagrado y esas ganas de que acá no nos saquen puntos, de que tenemos que sumar y estar ahí arriba.
Quedó demostrado que la actitud la negocian…
Yo creo que nosotros por dentro lo sabemos, pero es importante que se vea plasmado en la cancha y la gente lo sienta, se contagie. Porque este equipo es eso. Un equipo de buenos jugadores, que nunca van a negociar la entrega y el sacrificio.
¿Motiva enfrentar a un rival que sale a jugar?
Exactamente. Lo que se ve de Almagro es que desde que ha agarrado Carlos Mayor en todas las canchas trata de jugar. Así que a nosotros nos viene bien y va a ser mejor para el espectáculo. Ojalá salga un partido abierto, con varias situaciones y lo podamos aprovechar.
¿Cómo analizan el buen presente defensivo?
Es bueno porque le da tranquilidad a los chicos de arriba. Si nosotros estamos sólidos y ellos concretan, seguramente los vamos a ganar los partidos. Y eso está bueno y ojalá cada día mejoremos un poquito más. Se que podemos porque atrás tenemos muchos jugadores jóvenes, con ganas de crecer, mostrarse y eso te da mayor solidez. El objetivo es que sea una constante a lo largo de todo el torneo.
¿Se desmitifica un poco el hecho que en defensa tienen que haber jugadores de experiencia, caudillos?
Yo creo que lo importante es el trabajo. Si tenés gente que quiere trabajar, bienvenido sea. Felipe (por el entrenador De la Riva) nos agarró en la pretemporada y nos hizo hacer muchos trabajos defensivos. Cuando recién se armaba el equipo, todos decían “de mitad de cancha para arriba vamos a andar bien”, abajo había dudas y bueno, hemos trabajado y con muchas ganas encontramos este presente. Ahora lo más difícil es mantenerle.
¿Cómo vivís el hecho de tener la valla menos vencida?
Me pone muy contento, pero como digo siempre, esto no es del arquero ni de los defensores. Es de todo el equipo, de todo el grupo. Acá somos 30 los que nos matamos en los entrenamientos y tiramos para el mismo lado.
¿Te llama la atención que Juan Segovia sea el goleador del equipo?
Quizás un poco sorprende por la calidad de delanteros que tenemos. Hay 4 o 5 atacantes de primera línea, pero lo de Juan está a la vista. Cuando me preguntaron por él antes de traerlo fui muy clarito. Es un defensor con mucho gol. Tiene muy buena pegada, va muy bien de arriba y se hace sentir.
Siempre le preguntamos a tus compañeros, ¿cómo llevás estos primeros en Lomas?
La verdad no lo puedo disimular. Hacía rato que no veía un club de ascenso tan ordenado, que esté con tan buena estructura desde la base. Eso es muy importante y lo único que queda de nuestra parte es mejorar día a día, y poder quedarme en Los Andes varios años más.