''Apunto alto''
Mano a mano con Pablo Solchaga, uno de los refuerzos para el próximo torneo. Sus objetivos, su buena relación con Cachín, la fórmula con Tridente y mucho más. "Quiero sentirme importante para el grupo y quedar en la historia del club", explicó.

Por Leandro Saltamerenda
¿Cómo fueron estos primeros días con el plantel? ¿Cómo te recibieron tus compañeros?
Bien, la verdad que encontré un grupo divertido, alegre y profesional por sobre todas las cosas. Y el cuerpo técnico también me recibió muy bien, así que estoy contento porque cuando uno llega a un lugar de trabajo nuevo tiene ciertas dudas y quiere sentirse cómodo. Pero acá realmente no tuve problemas y eso es lo más importante.
En el último torneo te tocó ascender con All Boys a Primera División y ahora bajas dos categorías para jugar en Los Andes, ¿lo tomás como una forma de redoblar la apuesta, de renovar los desafíos?
Sí, fue muy importante lo que conseguí en All Boys, pero necesitaba tener nuevas motivaciones, nuevos objetivos y eso lo encontré con la propuesta que me hizo Los Andes. Tanto Cachín (por Oscar Blanco) como los dirigentes me dijeron que la meta era ascender a la B Nacional y yo no pude decir que no. Es una linda prueba para mi carrera y ojalá que le podamos poner todas las ganas para sacarla adelante.
¿Qué Cachín te haya pedido con tanta insistencia en cuánto influyó sobre tu decisión?
Obviamente que cuando un técnico pide a un jugador te da un plus extra. Por eso, uno le tiene que retribuir toda la confianza adentro de la cancha. Igual, también va para todos. Para mis compañeros, para los dirigentes que me contrataron y a los hinchas que sábado tras sábado nos van a estar apoyando.
Una historia bastante particular la qué te une con Blanco. Porque ya había mostrado cierto interés en dirigirte en otras oportunidades…
Exacto. Hace un par de años me quiso llevar a Italiano, pero como yo tenía un contrato especial con All Boys de no poder jugar en otro club que sea de la misma categoría no se dio. Y después, cuando él estaba en las Inferiores de Boca me llevó a entrenar con ellos, pero como yo ya estaba en el plantel profesional de Almagro priorice quedarme ahí. Pero bueno, yo sabía que en algún momento nos íbamos a encontrar y tocó acá en Los Andes.
¿Cómo analizas este plantel de Los Andes? Porque de afuera se ve con mucha juventud, pero bien rodeado de jugadores de experiencia…
Y, yo siempre digo que todo equipo que quiere pelear cosas importantes tiene que contar con gente de experiencia y una base joven para acompañar el proceso. Y me parece que acá lo tenemos. Está Celaya, el Pato, Cubito, Tridente y eso en partidos clave va a ser muy importante.
Otra vez te toca jugar en esta divisional tan complicada, ¿cómo ves el mercado de pases hasta el momento?
La verdad que todos los equipos se están armando muy bien. Por lo que uno lee o escucha, los clubes grandes se reforzaron con jugadores de categoría y eso a la larga te simplifica las cosas. Y nosotros de a poco nos estamos armando. Sabemos que todavía tienen que llegar un par de jugadores más y recién cuando se acerque el inicio del torneo vamos a ver para que está cada uno.
Desde lo físico, en estos días se te vio trabajar muy bien a la par del grupo, ¿cómo te sentís vos?
Realmente no me puedo quejar. Después del partido con Central tuve un mes de receso y lo disfruté al máximo. Fueron absolutas vacaciones, es decir descanso y renovar energías. Y ahora que volví a los entrenamientos me siento muy bien. Trabajé a la par de los chicos, sin ningún problema y creo que hasta yo mismo me sorprendí por la forma que adapté.
Siempre decías que era especial jugar frente a los equipos grandes de la categoría, ¿qué significa para vos tener ahora de tu lado a los hinchas de Los Andes?
Y, es muy importante. Como dije antes, vine a este club por Cachín, porque sus equipos siempre pregonan buen juego, por los compañeros que iba a tener y por sobre todas las cosas, porque Los Andes es un grande. Uno siempre apunta alto. A nadie le gusta salir a la cancha y que haya 2.000 personas. Entonces, uno de los puntos que hizo inclinarme por el sí fue la convocatoria. Yo quiero jugar a cancha llena, con la gente alentando y que confíe en nosotros. Así que esperemos conseguir resultados rápido para que el hincha se entusiasmé y vaya colmando las tribunas sábado a sábado. No tengo dudas de que lo va a hacer, porque las veces que me tocó enfrentar a Los Andes ví un buen marco y eso para el jugador es muy lindo.
Más allá de que todavía no esté oficializado, uno mira el plantel y ve entrenando juntos a Tridente y Solchaga. ¿Da para ilusionarse con esta dupla de ataque?
Ojalá. Es lógico que la última decisión la tiene el técnico, pero Tridente es un jugador muy importante y para mi forma de juego puede ser de gran ayuda. Además es goleador y cuenta con un aval que no muchos tienen.
¿Para qué vino Solchaga a Los Andes?
Para ascender. Yo vine con ese objetivo y ojalá lo logremos. Todavía no empezó el torneo, aunque yo te puedo asegurar que vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para pelear en los primeros puestos. Quiero sentirme importante para el grupo y quedar en la historia del club como uno de los delanteros que devolvió a Los Andes al Nacional.