Le llegó la hora

Por Leandro Saltamerenda

El salto no es casual. Muchas esperanzas se habían depositado en él. Junto a Guille Ojeda era una de las proyecciones más importante de su categoría. Ya lo habían seguido de cerca Enrique Hrabina (lo promovió) y Luis Blanco (lo llevó al banco), pero fue Germán Corengia quien lo puso ante tal oportunidad: el debut en Primera División. Sí, Claudio Leguizamón, un volante atrevido de tan solo 18 años, será de la partida este sábado frente a Acassuso y no para de asombrarse: “Día a día lo venía pensando y ahora me llegó esta chance. La verdad no lo puedo creer. Es el sueño hecho realidad. Estoy muy contento y ojalá que pueda aprovecharlo”. Y agregó: ”Lo que más me gusta hacer es ayudar a mis compañeros y jugar al fútbol. Cuando tengo la pelota en los pies disfruto mucho y espero que de esa forma también lo sienta la gente de Los Andes”. Así es Legui. Todavía no empezó el partido y ya tiró una pared y fue a buscar la descarga…
“Le puede aportar frescura y explosión al equipo. Es un jugador completo, y también le veo cosas de Brítez Ojeda. Tal vez tienen características diferentes, aunque se parecen mucho en la visión de juego, la pegada”. ¿Quién hace tamaña comparación? Corengia, quien otro si no. El que le da la confianza y lo respalda en este desafío. “La idea es que se asocie con Jaime Molfeso y pueda generar más movilidad por el sector derecho. Más allá de las proyecciones del Kily Vega va a ser muy importante porque conoce la posición y me cumple lo que le pido”, reveló el entrenador. Pero no será una tarea sencilla. Porque el Quemero viene en levantada, y Leguizamón sabe que debe apoyarse en los jugadores de mayor experiencia. “Estoy rodeado de muy buenos compañeros y eso influye mucho. Me dicen Legui esto, Legui lo otro, y a mí me viene muy bien. Yo sé que recién estoy empezando y lo mejor es que ellos me acomoden en la cancha. No me puedo quejar”, se sinceró el pibe.
Habló el protagonista, también el que lo pone en cancha, y falta la palabra de uno de sus descubridores. Se trata de Néstor Garay, integrante del actual cuerpo técnico y quien lo dirigió (junto a la Vieja Pizarro, Nelson Videla, entre otros) en Inferiores. “Tengo una alegría inmensa porque Legui está hace nueve años en el club y a mí me tocó vivir en carne propia todo su proceso en Villa Albertina. Hizo un sacrificio muy grande para llegar acá y tuvo sus frutos”, expresó Tito. Y detalló: “Es el momento indicado para ponerlo como titular porque hace varios meses que está trabajando con el plantel, por sus condiciones naturales, por su buen despliegue físico y porque tácticamente es uno de los jugadores más ordenados”. Con eso es suficiente. Tiene pinta de crack…
“Espero no fallarle a la gente y brindarle mi fútbol”. Así se despidió Legui. Como un pequeño gigante. A jugar…