Apostillas en Campana
Sin ser excusa, Los Andes se vuelve nuevamente con las manos vacías de la cancha de Villa Dálmine, un terreno hostil donde le cuesta hasta convertir goles y que varios futbolistas del actual plantel conocen bien pero no pudieron revertir la historia.
Por Pablo García
HABLA LA HISTORIA: Campana se transformado en una fortaleza impenetrable para el Mil Rayitas, donde hace 34 años que no obtiene una alegría: hay que remontarse a 1983 para aquella victoria con goles de Ifrán y Garay, mientras abría el marcador Portillo para el dueño de casa. En este lapso de tiempo, Los Andes sufrió cuatro derrotas y obtuvo tan solo cuatro unidades al conseguir igualar. Inclusive lleva poco más de 450’ minutos sin convertir en ese terreno, siendo el último grito del uruguayo Gilmar Gilberto Villagrán, quien en el epílogo del encuentro selló las pardas en 1994. Ni siquiera pudo el cabezazo de Osvaldo Miranda que reventó el travesaño romper la maldición en el arco contrario…
EN EL ÁREA NO PASA NADA: Tomas de catch, inclusive de kick boxing que pasaron inadvertidas para Nazareno Araza. Si bien ambos forcejeaban, Alarcón le hizo una toma de lucha grecorromana a Mati Valdez, para luego aprovechar a quedar sin marca y abrir el marcador. El 2 de Los Andes salió despedido a protestarle al árbitro y solo recibió como respuesta una tarjeta amarilla. Sobre el final de la primera parte, el ‘Chueco’ Mendieta casi recibe una patada criminal de Papa, cuando el arco estaba desguarnecido: el 3 del Violeta levantó su pierna derecha a la altura de la cabeza del media punta Mil Rayitas, que el juez omitió como jugada peligrosa…
SPIDER-MAN CAMPANENSE: Tras el centro de Junior Mendieta, ‘Pastelito’ Cérica metió un cabezazo y colgó la pelota en el alambrado. En el entretiempo, un par de asistentes de campo intentaron desenganchar la redonda a pelotazos, pero hubo pocos aciertos y fuerza para que cayera, mientras en la tribuna se entretenían al grito de ‘oleee, oleee’. Hastiado, finalmente llegó el hombre araña, quien trepó al alambrado para desenredar la redonda del tejido…
EL REINO DE LA AMISTAD: Hubo muchos futbolistas que pasaron por ambos bandos, por eso fue un inicio a puro beso y abrazo, como los actuales Mil Rayitas: ‘Chino’ Sanabria, Ezequiel Cérica, Matías Valdez y Nico Álvarez. Sin embargo, solo Cérica se llevó una pequeña ovación del público local con un “ole, ole, ole, Pastel, Pastel”, que respondió con aplausos. Por su parte, Mati Valdez sintió el rigor de la tribuna. También ex Mil Rayitas lucían la casaca violeta como Ramiro López y Jorge Córdoba, mientras Marcelo Tinari, quien amagó a entrar, quedó ocupando un lugar entre los suplentes. Los entrenadores también son conocidos por los ex dirigidos y equipos, tanto Sergio Rondina como Felipe De La Riva, quien no pierde las mañas: hizo regar el campo en el segundo período en el sector defensivo Mil Rayitas y criticó al defensor Alarcón por dejar al conjunto de Campana momentáneamente con 10 hombres, al ser asistido fuera del campo de juego por un corte a la altura de la ceja…
LAS CHICAS SUMAN MINUTOS: Nuevamente Nadya Chiarotti dirigió un partido de Los Andes siendo parte de la terna arbitral. Este año también Chiarotti lo había hecho con la derrota de Lomas en tierra correntina por 0-1. Esta fue quizás parte de la antesala para que Gisella Trucco (entre otros partidos asistente en el torneo pasado de Los Andes – Atlético Paraná) haga historia en Primera División el próximo lunes, al ser parte de la terna arbitral entre Defensa y Justicia y Olimpo.